SALTA – Un escándalo sacude a la fuerza de seguridad en la localidad salteña de Orán luego de que se abriera una investigación por la presunta desaparición de dinero incautado durante un procedimiento oficial. La Dirección de Asuntos Internos de la Policía de Salta decidió separar de sus funciones a 21 efectivos involucrados mientras se investigan los hechos.
La medida disciplinaria se tomó en medio de diligencias internas destinadas a esclarecer el destino de los fondos secuestrados, cuya desaparición se habría producido hace varios meses. La investigación formal apunta a determinar posibles irregularidades en el manejo de los efectos incautados, y aún no se difundieron detalles sobre los montos extraviados ni sobre el procedimiento que originó la incautación.
Fuentes de la fuerza explicaron que la separación de los agentes forma parte del protocolo de investigación interna, que busca preservar la transparencia y garantizar que los responsables respondan ante la Justicia en caso de comprobarse irregularidades. En paralelo, se realizan auditorías sobre la cadena de custodia de los bienes secuestrados para determinar posibles negligencias o faltas administrativas.
La Dirección de Asuntos Internos trabaja en coordinación con la fiscalía local para recopilar información, incluyendo registros contables y testimonios de los policías que participaron en el procedimiento original. Además, se prevé que los oficiales separados queden inhabilitados temporalmente para intervenir en cualquier actividad operativa hasta que concluyan las diligencias.
La medida generó preocupación en la comunidad de Orán y entre otros miembros de la fuerza, debido a la magnitud del operativo y la cantidad de agentes involucrados. La Policía de Salta subrayó que esta actuación responde al compromiso institucional de garantizar la transparencia y la rendición de cuentas dentro de la fuerza, y que se aplicarán sanciones administrativas o penales según los resultados de la investigación.
Hasta el momento, no se informó si se detectaron otras anomalías en procedimientos similares realizados en la región, ni si habrá ampliación de la investigación a otros efectivos o jefaturas. Lo que sí se confirmó es que las diligencias continuarán hasta esclarecer plenamente el paradero del dinero secuestrado y las posibles responsabilidades de cada uno de los 21 policías involucrados.
La causa pone de relieve la necesidad de reforzar los controles internos en procedimientos de secuestro de bienes y la importancia de la custodia estricta de los fondos incautados para prevenir irregularidades, tanto en Salta como en otras jurisdicciones del país.