TENSIÓN – La tensión entre Moscú y Washington volvió a escalar luego de que Estados Unidos confirmara haber atacado un barco cerca de las costas de Venezuela, supuestamente vinculado al narcotráfico internacional. El incidente ocurrió el jueves 3 de octubre y dejó al menos cuatro muertos. Según el Pentágono, el operativo formó parte de una misión autorizada por el Consejo de Seguridad de la ONU para combatir el tráfico de drogas en el Caribe. Sin embargo, Rusia denunció que la acción violó el derecho internacional y acusó a Estados Unidos de utilizar la lucha antidrogas como excusa para ampliar su presencia militar en la región. El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso emitió un comunicado exigiendo una investigación independiente y advirtiendo sobre una posible “respuesta diplomática contundente”. Venezuela, por su parte, calificó el hecho como una “agresión imperialista” y convocó al embajador estadounidense en Caracas. Analistas internacionales sostienen que el episodio podría reavivar tensiones geopolíticas similares a las de la Guerra Fría, especialmente en un contexto de creciente cooperación militar entre Rusia y algunos países latinoamericanos. En paralelo, la Casa Blanca defendió la operación alegando que el barco transportaba más de dos toneladas de cocaína con destino a Centroamérica. El Consejo de Seguridad se reunirá esta semana para evaluar el incidente, mientras aumenta la preocupación por la militarización del Caribe y el impacto que podría tener en la estabilidad regional.
Rusia condena ataque estadounidense a presunto barco de narcóticos frente a Venezuela
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