MOMENTOS DE TENSIÓN – Una multitud abucheó y lanzó insultos al mandatario y a Karina Milei, que tuvieron que abandonar el lugar rápidamente bajo custodia policial.
El presidente de la Nación, Javier Milei, y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, vivieron ayer al mediodía un episodio de fuerte tensión en el microcentro porteño, cuando fueron abucheados por vecinos al salir de un edificio en Avenida de Mayo al 605, a pocas cuadras de Plaza de Mayo. La escena se desarrolló en medio de una visible demostración de repudio de la ciudadanía, que se volcó a las calles aledañas para expresar su descontento con la presencia de los dirigentes de La Libertad Avanza, quienes se encontraban en la zona para participar de una reunión con empresarios en el histórico Cénit, luego del encuentro de Gabinete realizado esa mañana.
Según relataron testigos y confirmó la agencia Noticias Argentinas, una vez que los hermanos Milei dejaron el edificio, se concentró una multitud que comenzó a insultarlos mientras subían a sus vehículos oficiales. Entre los gritos, se escuchaban expresiones de rechazo como “hijo de puta”, en un claro signo de descontento ciudadano que reflejó la polarización creciente en torno a los libertarios en los días previos a las elecciones legislativas del 26 de octubre. La situación obligó a que ambos fueran escoltados de inmediato por personal de la Policía Federal Argentina y la seguridad presidencial, garantizando su salida sin incidentes mayores pero evidenciando la tensión palpable en las calles del microcentro porteño.
Este episodio se inscribe en un contexto de creciente confrontación pública hacia los dirigentes de La Libertad Avanza. En los últimos días, cada aparición del presidente Milei y de su entorno ha estado marcada por manifestaciones de rechazo en distintos puntos del país. El pasado martes, durante una visita a la ciudad costera de Mar del Plata, Milei también se cruzó con transeúntes que le reclamaron por la situación económica y social del país, dejando en evidencia la sensibilidad de la opinión pública frente a sus políticas y su estilo de gobierno, que generan tanto adhesión como rechazo.
En el caso de la jornada de ayer, luego de la breve y tensa presencia en Avenida de Mayo, Javier Milei se retiró rumbo a la quinta de Olivos, mientras que Karina Milei regresó a Casa Rosada para encabezar una reunión de la mesa de campaña. La situación demuestra, por un lado, la necesidad de un despliegue de seguridad reforzado para los integrantes del Ejecutivo en su tránsito por espacios públicos y, por otro, la percepción de cercanía y exposición que genera la presencia directa de los líderes políticos en el espacio urbano.
Especialistas en comunicación política señalan que estos episodios reflejan la intensidad de la campaña electoral en un contexto de alta polarización. La ciudadanía, a través de manifestaciones espontáneas en la vía pública, ha encontrado un canal de expresión inmediata hacia los líderes políticos, que muchas veces trasciende el ámbito de la crítica mediática o el debate institucional.
El presidente, mientras continúa con su agenda de campaña y gestión, enfrenta un contexto donde la opinión pública se expresa con fuerza en espacios urbanos. La interacción directa con los vecinos y los episodios de tensión como el ocurrido ayer en Avenida de Mayo representan un desafío para su estrategia de comunicación y para la planificación de sus actividades públicas en las próximas semanas, mientras se acercan las elecciones legislativas que definirán la composición del Congreso y marcarán un nuevo capítulo en la política argentina.