Con las visitas educativas, cada vez más adolescentes se adentran en la historia, las tradiciones, los reclamos y los triunfos de la comunidad, localizada en el epicentro de los barrios privados responsables de la destrucción de enterratorios ancestrales. Esta experiencia de lucha atraviesa distintos contenidos de la currícula escolar y eso motiva a muchos docentes a organizar salidas al sitio sagrado de los pueblos originarios, ubicado en el límite de Tigre y Escobar.
El miércoles 2 de noviembre por la mañana, llegaron estudiantes de primer año de la Escuela Secundaria Nº4 de Maschwitz y por la tarde, un grupo de quinto año de la Secundaria Nº43 del barrio San Pablo de El Talar (Tigre). El primer contingente vino con dos micros atravesando el barrio privado San Benito, mientras que el segundo viajó en transporte público, caminó por el paraje Punta Canal y cruzó el Arroyo Garín con el bote de uso vecinal.
«En marzo trabajamos un artículo sobre Punta Querandí para investigar de qué se tratan las ciencias sociales y quiénes son los pueblos originarios, con la idea de venir a fin de año para ver qué estaba sucediendo», contó Verónica Zallocchi, profesora de antropología de la Secundaria Nº4 de Maschwitz, la más antigua de la localidad (creada en 1984) y una de las más concurridas.
«Me asombra todo lo que lograron y cómo está hoy Punta Querandí», destacó la docente, quien contó que había estado en los inicios del acampe en defensa de lugar hace más de 10 años. Pero no obstante esos avances, resaltó uno de los temas que no fue solucionado: «A los chicos les sorprendió mucho tener que entrar por un barrio privado y todos los problemas de accesos que tienen”.
Como es habitual, después de una ronda de presentación, se realizó la recorrida por el Museo Autónomo de Gestión Indígena y por las distintas construcciones y espacios significativos del territorio, ubicado en los últimos humedales continentales de la región.
«Queremos que los padres y madres conozcan el trabajo de Punta Querandí»
