(NA) – El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, habló sobre el alarmante brote de dengue que atraviesa el país, que ya superó los 200 mil casos.
«Históricamente, el dengue solía manifestarse desde la época de Fiestas hasta las primeras semanas de abril, pero ahora hemos observado casos desde noviembre», subrayó.
Quirós dió información importante sobre el comportamiento del mosquito transmisor, el Aedes Aegypti, conocido como «mosquito mascota». Contrario a la creencia popular, el ministro aclaró que este mosquito no suele estar en el aire o en lugares abiertos.
«No es un mosquito que te zumbe el oído o ande por los techos suele habitar en lugares protegidos, como debajo de muebles, y tiende a picar alrededor del ser humano, especialmente en los tobillos», explicó Quirós.

El ministro le recomendó a los vecinos usar repelente en los tobillos. «Ponerse en las zonas que no podés ver», dijo.
Quirós también desmitificó la idea de que cualquier mosquito puede transmitir la enfermedad. «Tengo mucha gente que sale a correr y se pone repelente. Ahí no te va a picar el mosquito que transmite la enfermedad, te va a picar otro tipo», afirmó.
Por último, resaltó los momentos del día en los que el Aedes aegypti tiende a ser más activo. «Es un mosquito que no pica de noche, en la oscuridad. Es un mosquito que pica habitualmente a la mañana, entre el amanecer, media mañana o el atardecer. El horario tremendo es entre las cinco y las 21:00, es el horario donde él tiene la costumbre de volar y picar», cerró.
El ministro de Salud porteño señaló que el 70% de los casos de dengue “son asintomáticos” y dio algunos detalles sobre la situación actual de la Ciudad en torno al brote histórico de la enfermedad y las guardias colapsadas en todo el país.
“Nos tenemos que adaptar a las estructuras físicas del tema. En este momento, para los casos de dengue, funcionan los mismos centros que se utilizaron para la pandemia de Covid-19”, detalló.
El funcionario también dio a conocer un dato poco conocido y es que “el 70% de los casos son asintomáticos”, por lo que las largas filas en los hospitales preocupa ante el número elevado de positivos.
“Lo más importante es detectar la gravedad. La enfermedad genera mucha fiebre y si no hay buena hidratación la situación puede empeorar, recién cuando este síntoma baja aparecen los otros síntomas que generan preocupación”, explicó.
Acerca de los testeos en Capital Federal, el ministro indicó que la certificación bioquímica no es indispensable ya que se puede obtener un diagnóstico por nexo epidemiológico a partir de los síntomas y lugar donde se confirmó el caso: «Igual hay análisis de sangre, PCR y a través de los anticuerpos en el plasma».
“Es importante decir que es una enfermedad leve pero que cuando aparecen los síntomas genera molestia hasta en la cama. Hay que llevar tranquilidad de que la segunda vez que tenes dengue está documentado que aumenta la gravedad pero siempre en los rangos menores al 1%”, esclareció.
De igual modo, el funcionario destacó que este año hay más cuadros de gravedad en la Ciudad por el incremento de casos: “Este 2024 está la circulación del serotipo D2”.
El ministro dijo además, en declaraciones al canal de noticias TN, que durante la semana pasada se reportaron más de 2 mil casos y “pensamos que va a seguir así las próximas dos o tres semanas que se vincula al fin del verano”.
Quirós también mencionó lo siguiente: «Debemos recordar que al Aedes se lo llama mascota porque no vive en la plaza, en el espacio público, en el lago de Palermo. Ese es otro. El que contagia la enfermedad es mascota, vive alrededor nuestro, en la casa, en el trabajo, en donde hay muchos seres humanos, mucho tiempo, en el día».
Al referirse a la postura de la Ciudad sobre la aplicación de la vacuna contra el dengue, sostuvo: “nosotros nos regimos por la opinión de los expertos de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNain) que son ellos. Ellos dijeron en diciembre que esa vacuna lleva apenas un año y ha sido testada en niños y jóvenes de 4 a 18 años en donde se mostró con claridad su seguridad y eficacia por lo cual se ha aprobado en muchos lugares. Pero en mayores de 60 años no está documentado y todavía no se sabe si la OMS la recomienda para zonas endémicas como en sería el norte argentino o zonas epidémicas como Buenos Aires”.
Y agregó: “Me parece muy importante, debido a este debate de la vacuna, que en estas semanas y meses se termine de recolectar información científica sobre los lugares en los que se ha aplicado y poder tener una posición bien clara para la Argentina para sobretodo prepararnos para el siguiente ciclo”.