Montaron una empresa fantasma y se quedaban con los elementos de valor de los clientes, sobre todos los que debían transportar al exterior. Hay tres detenidos.
Personal de la Sub Delegación de Investigaciones de Pilar (DDI), desbarató una banda que se dedicaba a estafar a sus clientes cuando contrataban el servicio de mudanza, a través de una empresa fantasma denominada “Murrap”. Los ilícitos eran más comunes cuando los traslados se realizaban al exterior del país. La empresa operaba en Pilar, José C. Paz, Escobar y alrededores. Una de las víctimas que realizó la denuncia que desencadenó en la investigación es de Pilar.
Según pudo saber El Diario, se trata de tres sujetos -dos de ellos, hermanos entre sí- que operaban esta compañía. La denuncia que dio lugar a las primeras pesquisas fue realizada el 20 de julio último, cuando una mujer de 34 años, domiciliada en Pilar, contrató por Internet, los servicios de esta empresa para realizar una mudanza hacia la localidad de Carmelo, en Uruguay.
Se supo que el pago de ese servicio fue abonado en dólares y a una cuenta on line, pero que la víctima, esperado los plazos estimados, nunca recibió los muebles y los demás elementos de su propiedad, motivo por el cual realizó la correspondiente denuncia policial.
Los investigadores lograron establecer que los responsables eran estos tres sujetos -con apoyo de varios empleados- quienes efectuaban las maniobras delictivas de manera sistemática y reiterada.
Las fuentes detallaron que una vez individualizados los tres sujetos, pudieron determinar que el contacto con los clientes era todo “a través de diferentes aplicaciones de internet, ya que no tenían un lugar físico real, utilizado como base de la respectiva empresas. “Los depósitos iban rotando constantemente”, sumaron. “Una víctima es de Pilar, pero hay 18 que son de todos lados y la banda viene operando de esta forma desde el año 2019” aseguraron los investigadores.
Por otra parte, también aclararon que por las mudanzas hacían viajes locales, regionales y provinciales, pero “aprovechaban de robar, con los viajes de afuera, porque pensaban que las víctimas al estar en el extranjero, ya no volverían a reclamar”.
Con toda la información recolectada se libraron las órdenes de allanamiento, que tuvieron lugar en José C. Paz. El primero fue en Labardén al 1400, a donde se secuestraron dos teléfonos celulares, un pendrive, una notebook, un set de cubiertos y un sobre de papel con el nombre de la empresa.
Además, detuvieron a un sujeto cuyas iniciales son C.A.L, de 41 años. Luego, en la misma calle, pero a la altura del 1500, detuvieron a su hermano, M.R.L de 44 años. También se incautaron “cuatro muebles embalados, cinco teléfonos celulares, dos tablets, un Smart TV, dos parlantes, una potencia, una moto Motomel Blitz 110 y un Chevrolet Spin”.
Acto seguido, en Bounarotti al 100, la policía detuvo a T.L.C de 19 años y se secuestraron cuatro teléfonos celulares. Asimismo, en Blandengues 1058 se produjo “el secuestro de 88 bultos, conteniendo en su interior diversos muebles, electrodomésticos, cuadros y otros”. Los tres detenidos fueron puestos a disposición de la justicia. La causa por “asociación ilícita y estafas reiteradas» es llevada adelante por la Unidad Funcional de Instrucción N°4 y el Juzgado de Garantías N°6, ambos Pilar.