

La alegría no es solo brasilera, no. Demostramos que también puede ser argentina y, sobre todo, escobarense.
La victoria del equipo argentino por sobre el seleccionado de Países Bajos se vio, se vivió y se sufrió nuevamente en todos los puntos de encuentro instalados por la Municipalidad de Escobar y tras el último penal que dio por ganadora a la Selección argentina, explotó la alegría.
Ni el viento, ni la lluvia, ni las piedras hicieron que el festejo sea menor.
Los vecinos gritaron, cantaron y festejaron que la Scaloneta esté entre los ocho mejores equipos del mundo y, seguramente, mañana se repetirá el ritual y las cábalas para enfrentar al seleccionado croata.
