ESCOBAR – A raíz de una nota publicada en nuestras redes sociales respecto a un grave incidente se registró en el Colegio del Faro, en Belén de Escobar, donde alumnos de 4º año arrojaron un petardo dentro del aula, generando un momento de gran tensión y alarma entre sus compañeros, el jueves el representante legal del instituto se comunicó con este medio para aseverar que por tratarse de menores de edad no habría comunicado oficial y que lo ocurrido se trató y se trataría puertas adentro.
El hecho no fue negado, así como también es justo aclarar que este medio no incumplió medidas legales vigentes por tratarse de menores, pero lo cierto es que la detonación del artefacto pirotécnico en un espacio cerrado y con la presencia de un grupo numeroso de adolescentes no solo provocó miedo, sino que también implicó un considerable riesgo de seguridad.
Este medio tampoco vulneró confidencialidad alguna, dado que se narró un hecho con los datos obtenidos hasta ese momento, desconociéndose las medidas tomadas por las autoridades educativas, cosa que fue también se aclaraba en la nota subida a la web.
Un petardo, aunque pequeño, puede causar quemaduras, lesiones auditivas o incluso daños oculares en un ambiente confinado, además del pánico que genera una explosión súbita. La gravedad del hecho se magnifica al pensar en las potenciales consecuencias físicas y psicológicas para los estudiantes, especialmente para aquellos con hipersensibilidad a estímulos externos, como los alumnos con autismo, cuya rutina y tranquilidad se vieron bruscamente alteradas.
La situación se agravó aún más cuando, durante la intervención de las autoridades escolares, se descubrió que los adolescentes tenían bebidas alcohólicas entre sus pertenencias. Este hallazgo añade una capa de preocupación, indicando una posible ingesta o intención de consumo de alcohol en el ámbito escolar, lo cual es estrictamente prohibido y representa otro factor de riesgo para la seguridad y el bienestar de los estudiantes.
Comunicado de la institución a las familias
«Queridas familias: En el Colegio del Faro, el cuidado y la seguridad de todos los integrantes de nuestra comunidad son pilares fundamentales de nuestra cultura institucional. Es por ello que queremos compartir con ustedes una situación que tuvo lugar ayer (miércoles) a las 16.00 en nuestra institución. Ante lo sucedido, actuamos con celeridad, responsabilidad y firmeza».
«Durante el desarrollo de una clase en el nivel secundario, tres estudiantes participaron de acciones que no corresponden con las normas de convivencia y cuidado que promovemos. Lo sucedido estuvo relacionado con el uso de un elemento de pirotecnia y la presencia de un termo que contenía restos de una bebida alcohólica».
«Frente a esta situación, se actuó de forma inmediata: se abrió un espacio de diálogo e indagación con los estudiantes, se identificó a los responsables y se convocó ese mismo día y de forma urgente, a sus familias».
«Además se informó a la Secretaría de Inspección y se realizaron las consultas legales correspondientes».
«Por otro lado, se definieron medidas disciplinarias y administrativas acordes al grado de participación y a la gravedad de lo ocurrido».
«Nos entristece que un medio local haya difundido la noticia sin contar con información precisa sobre el abordaje institucional llevado adelante desde el primer momento. Vulnerando también la confidencialidad necesaria ante una situación que involucra menores».
«Queremos transmitir tranquilidad a toda la comunidad educativa. La situación fue contenida y se tomaron las medidas necesarias. Continuamos trabajando con compromiso para garantizar un espacio seguro, de cuidado y aprendizaje, en el marco de nuestros principios institucionales y de los acuerdos de convivencia vigentes. Seguimos apostando al diálogo, a la construcción colectiva y al acompañamiento de cada estudiante en su camino de crecimiento».
Firmó el comunicado el equipo directivo del nivel secundario.