Una callecita muy conocida en el corazón de Belén de Escobar es el Pasaje Moreno. Se trata de un pasaje estrecho, ubicado entre la avenida Eugenia Tapia de Cruz y Edilfredo Ameghino, que siempre ha sido un lugar muy especial para los vecinos. La calle no admite vehículos de gran tamaño y no tiene veredas claramente delimitadas, lo que le da un carácter muy particular y cercano a la comunidad.
Antes, en ese pasaje convivían diferentes espacios: negocios, un campo de deportes, un jardín de infantes, viviendas y también parte del centro de diálisis. Era un lugar donde los niños solían reunirse para merendar, hacer tiempo antes de ingresar al campo de deportes, o simplemente sentarse a charlar con amigos y vecinos. Además, los maceteros centrales que adornaban la calle ayudaban a delimitar el espacio y a mantener cierta seguridad, además de embellecer el entorno.





Recientemente, una vecina de la zona se comunicó con nuestro medio para expresar su preocupación. Nos contó que, por alguna razón, «la municipalidad decidió retirar los maceteros centrales que impedían el paso de vehículos. Ahora, los autos circulan libremente por el pasaje, sin obstáculos, lo que ha generado una situación de peligro para los niños, padres y todos los que frecuentan ese lugar». La vecina envió fotos para ilustrar la peligrosidad de esta modificación y resaltó que la presencia de vehículos en ese espacio puede poner en riesgo la seguridad de quienes allí están siempre.

Este cambio ha generado bastante preocupación, que teme que la eliminación de los maceteros pueda aumentar los riesgos de accidentes o incidentes, especialmente en un lugar tan concurrido por familias y niños. La situación invita a reflexionar sobre la importancia de mantener espacios seguros y adecuados para el uso de todos, preservando la tranquilidad y protección de quienes viven y disfrutan de ese rincón de Belén de Escobar.