PÉRDIDA SALARIAL – Según un informe de la consultora Vectorial, los trabajadores registrados acumulan una pérdida promedio del 11% de poder adquisitivo desde noviembre de 2023. El mayor ajuste recae sobre los empleados públicos, mientras que los no registrados muestran una recuperación.
Con los datos del nuevo Índice de Precios al Consumidor (IPC), los salarios registrados acumulan una caída real del 11,2% desde el inicio de la gestión de Javier Milei. El informe, elaborado por la consultora Vectorial, advierte que el deterioro del poder adquisitivo se concentra principalmente en el sector público, donde la pérdida alcanza casi el 20%, mientras que los ingresos del sector privado permanecen prácticamente congelados frente a los niveles de noviembre de 2023.
El relevamiento señala que la evolución de los haberes durante 2025 muestra un comportamiento irregular: solo en febrero, mayo y julio se registraron aumentos reales, mientras que en enero, marzo, abril y junio se observaron retrocesos. En comparación con 2023, la caída frente a la inflación es del 5,25% con la canasta tradicional, pero se amplía al 11,2% al aplicar la nueva estructura del IPC, que incorpora una ponderación mayor de los servicios públicos y un menor peso de los alimentos.
“La dinámica de los primeros siete meses del año evidencia un patrón errático, sin una tendencia clara de recuperación sostenida”, indica el informe, que describe la evolución de los ingresos como un “amesetamiento”.
En el sector privado formal, el poder de compra retrocedió apenas 0,33% respecto de noviembre pasado, mientras que entre los empleados estatales la pérdida llega al 14% según la medición oficial del INDEC. Con la actualización del IPC, las brechas se amplían: los salarios públicos pierden 19,4% en términos reales y los privados, 6,6%. De esta forma, el índice de poder adquisitivo se ubica en 80,6 puntos para el sector público y 93,4 para el privado.
El informe destaca que mientras los salarios privados se mantuvieron cercanos al nivel base de noviembre —con ligeras mejoras entre noviembre de 2024 y febrero de 2025— el sector público no logró revertir su deterioro.
La única excepción la constituyen los trabajadores no registrados, cuyo nivel salarial creció por encima de la inflación. Según los datos del INDEC, este segmento alcanzó un índice de 117,8 puntos con la metodología anterior y de 110,7 con la nueva canasta, lo que representa una suba real del 17,8% y 10,7%, respectivamente.
“La evolución de este grupo contrasta fuertemente con lo observado en los asalariados formales. Desde su punto más bajo, entre febrero y abril de 2024, los ingresos informales iniciaron una recuperación continua y sin interrupciones”, explicó Vectorial.
No obstante, los analistas aclaran que los datos del empleo no registrado deben interpretarse con cautela, ya que se relevan a través de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), publicada con un rezago de varios meses.
“La foto actual muestra un mercado laboral cada vez más polarizado: empleados públicos con un poder adquisitivo muy deteriorado, trabajadores privados que apenas sostienen su nivel de ingresos y asalariados informales que lograron mejoras por su mayor flexibilidad y menor exposición a políticas de contención salarial”, concluye el informe.