El talentoso cantante porteño estuvo de visita en la redacción de grupoeldiario.com. Gran intérprete de Mariano Mores y el 2×4, se enorgullece de nunca haber perdido la esperanza ni el amor por su carrera artística.
Con 30 años de conservatorio y 10 en la escuela lírica, Jorge Ariel comenzó su carrera musical muy joven, con tan solo 15 años: “Fui el último cantor de las cantinas de La Boca cuando estaba el turismo. Canté en seis cantinas, con 18 años. Canté al lado de la esposa de Enrique Santos Discépolo y fui alumno del Maestro Carlos Figari en aquellos años”, relata con orgullo.
En la actualidad Jorge Ariel tiene dos profesiones, “como todo el mundo”: es cantor de tango y también peluquero de hombres. Sus estilos predilectos son el 2×4 y el de Mariano Mores.
Nacido en la zona del Abasto, se crio en las calles Ecuador y Tucumán, Ciudad de Buenos Aires. Hizo el servicio militar y se fue de la casa de sus padres para hacer la vida “bohemia”.
“De chico en aquellos años se escuchaba mucho el tango. Siempre supe que me quería dedicar a esto, más que nada a la parte melancólica y sentimental, quizás porque era la época, y además en todas las casas me llamaban para cantar en los cumpleaños”, recordó.
“Yo canto muy bien”, admite, siempre aclarando que lo dice con humildad, y mostrándose firmemente en contra de una problemática actual pero que viene arrastrándose desde hace años: la poca o nula remuneración de los músicos y artistas. “Me llaman para cantar en distintos lugares pero yo no voy, porque no me dan ni para los viáticos”, se lamenta el hombre, de 77 años.
“Hoy no pierdo las esperanzas. Uno tiene que vivir de ilusiones. Siempre tengo, en mi cabeza infantil, proyectos e ilusiones que nunca dejo perder, porque es mi única forma de envejecer feliz, a mi manera. Tengo más de cien temas en la cabeza, y por eso sigo insistiendo con esto”, finalizó.
Pueden buscar sus videos en YouTube, bajo el usuario Jorge Ariel.