Un curioso episodio de inseguridad se vivió este lunes por la tarde en la zona peatonal del centro de José C. Paz, cuando un hombre fue sorprendido intentando robar ropa de un comercio local. Lo que parecía un hecho delictivo más tomó un giro inesperado cuando, al ser descubierto, el ladrón rompió en llanto frente a los comerciantes y transeúntes.
El incidente ocurrió cerca de las 15 horas. Según relataron testigos, el individuo —aparentemente solo y sin antecedentes visibles— había ingresado a un local de indumentaria con intenciones de llevarse mercadería sin pagar. Sin embargo, su accionar fue advertido por una empleada del comercio, quien, sin perder la calma, alertó a sus colegas de los negocios cercanos. En pocos minutos, lograron interceptarlo y contenerlo dentro del local.
Para sorpresa de todos, lejos de reaccionar con agresividad o intentar escapar, el hombre comenzó a llorar desconsoladamente. Su actitud desconcertó a los presentes, quienes finalmente decidieron no radicar una denuncia formal y lo liberaron tras unos minutos, aunque no sin antes tomar una decisión estratégica: seguirlo discretamente para evitar que volviera a delinquir.
Efectivamente, minutos después, el mismo sujeto ingresó a otro comercio con intenciones similares. Pero esta vez, el personal ya había sido advertido por el grupo de comerciantes que lo había enfrentado anteriormente. Ante el segundo intento de robo, el local activó el protocolo de seguridad interna y dio aviso inmediato a las autoridades locales. El hombre, al notar que nuevamente había sido descubierto, abandonó el lugar sin concretar el hurto.
El inusual episodio generó tanto indignación como incredulidad entre los vecinos de la zona, quienes destacaron la rápida acción coordinada de los comerciantes, aunque también expresaron preocupación por la frecuencia creciente de este tipo de delitos menores.