El intendente estuvo acompañado por la diputada nacional Laura Russo, el presidente del Concejo Deliberante, Pablo Ramos; concejales de distintos bloques políticos y otras autoridades municipales. Se hizo entrega de un presente a la familia Lambertuchi, en el marco de las celebraciones por el 60º aniversario del partido de Escobar.
El Campito de la Estación ahora lleva el nombre de Antonio Lambertuchi, en homenaje al primer intendente de la historia del distrito, denominación impuesta en el marco de un festival protagonizado por diez bandas locales en tres escenarios de distintos géneros musicales. El evento, que se realizó el sábado, también contó con actividades artísticas, deportivas y culturales, una feria de emprendedores de la economía social y food trucks.
“La verdad para mí fue terriblemente emocionante. Me hizo muy feliz que se recuerde a mi padre, no solo como intendente, sino como persona”, expresó durante la oportunidad, muy agradecida, una de las hijas de Antonio Lambertuchi.
A su vez, en rueda de prensa, el intendente Ariel Sujarchuk resaltó que “cuando tenemos más responsabilidad lo que hay que tener es más humildad; ese es uno de los mensajes que nos deja Lambertuchi como intendente, en su nobleza, en su honestidad y en su catadura moral y la de toda su familia. No sos dueño ni rey del pueblo, sino elegido por una cantidad de vecinos para administrar lo mejor que puedas el destino de todos tus vecinos y honrar ese mandato popular, tratando de dejar la ciudad mejor de lo que la encontraste, para que el que venga a su vez siga haciendo su tarea. En segundo lugar, me parece que historia y progreso no son contradictorios. Si nosotros de esta plaza no hacíamos nada, la verdad, más que un campito iba a ser un baldío lleno de inseguridad, de cosas feas que venían pasando. Esto es un reencuentro de la historia con el presente y a través de él Escobar tiene toda la oportunidad de progresar. En cada acto de gestión lo venimos mostrando”, afirmó.
Financiada en su totalidad con fondos municipales, la obra de puesta en valor de este espacio público incluyó la construcción de la Plaza de Las Américas, un sector de juegos infantiles con un nuevo mangrullo, playones con canchas multideportivas, un skatepark y un anfiteatro a cielo abierto.
También se instalaron nuevas luminarias y se renovaron todos los artefactos existentes por lámparas LED, se ampliaron y se reconstruyeron los senderos internos y las veredas, se colocaron mesas de fútbol tenis y de ping pong, se creó un nuevo sector con juegos aeróbicos y un espacio de descanso con mobiliario urbano. Además, se renovó la feria artesanal con más de 100 puestos distribuidos en tres sectores de manera organizada.
El proyecto se completa con la construcción de una posta de seguridad y una oficina para el nuevo Centro Integral de Tránsito y Transporte Inteligente (CITTI), que cumplirá distintas funciones de control vehicular, así como la restauración del galpón del museo del Tren.