Por VGM Enrique Oscar Aguilar
«Cerrar la historia«
Cabo Segundo Maquinista Veterano de Guerra (Promoción 33°) Nelson Adrián Valdez, ex Tripulante del Crucero A.R.A. Gral. Belgrano
Han pasado muchos años de aquel día en que el Crucero Belgrano, mi buque, soltó amarras con un rumbo incierto, con un viaje que marcaría la vida de aquellos marinos jóvenes, que envueltos con la adrenalina de los años nuevos, no sabían lo que el destino les deparaba y así, con proa asía el sur, partimos con ese sueño.
Muchos momentos vuelven hoy a mi mente, tal vez más tranquilo, ya que el tiempo irremediablemente, cura, aunque a medias, las heridas del pasado y en ellos las imágenes de aquellos, que por caprichos del destino, no corrieron la misma suerte, la del regreso …
Hoy me encuentro en una situación algo diferente, durante mucho tiempo realice gestiones ante autoridades nacionales, políticos y todo tipos de medios periodísticos, para que de alguna forma me dieran la oportunidad de conocer aquel lugar por el cual, muchos compañeros, habían dejado su vida, y por la cual yo arriesgue la mía. Muchos que no conocen este sentimiento no lo entenderían. Es hasta para mí difícil de explicar, el cúmulo de sensaciones que habitan dentro del verdadero Veterano de Guerra, de aquel que en verdad, estuvo en Malvinas, como de aquel que en verdad, estuvo en unidades navales que participaron en el conflicto, ellos y solamente ellos, saben de lo que estoy hablando…
En este viaje, en que el gobierno nos ha permitido realizar , un sueño tan especial, cargado de tantas emociones con todo lo que significa para nosotros con el esfuerzo que ello implica tanto en lo económico como en lo burocrático, solo tenemos palabras de agradecimiento .
Queridos amigos, en aquellas islas tal vez, no solo nos sintamos extraños, quizás hasta ajenos. Lo que si estoy seguro que en aquellas tierras no solo encontraremos los pertrechos de lo que fue la guerra, y las balas servidas del caluroso combate. Compañeros… allí están los verdaderos héroes, los que por decisión del supremo dejaron madre, esposa e hijos para quedar en custodia y en señal de protesta. Al llegar seguramente un nudo de angustia en la garganta nos impedirá gritar el nombre de aquellos, solo para decir hermanos he vuelto.
Estas líneas, son para todos ustedes, para que este viaje pueda aliviar ese sentimiento que solo nosotros entendemos, para que pueda cerrar algo esa herida y que sepan aquellos, los héroes, que no los olvidamos que llevamos en cada uno de nosotros impregnado de cada madre, de cada esposa, y de cada hijo, el abrazo, el amor y el respeto permanente de todo un pueblo que los ama y siguiendo los preceptos religiosos , solo esperar que llegue el momento para podernos dar un gran abrazo y así recién de esta manera, «cerrar la historia».