La chica había sido vista por última vez por su familia a principio de año. Hay un hombre de 44 años detenido que tenía una tarjeta de débito de la joven, con la que había hecho retiros de dinero.
La Justicia confirmó que los restos óseos encontrados el 30 de abril pasado en un descampado de la localidad bonaerense de Lagomarsino, en Pilar, eran los de una joven embarazada que estaba desaparecida desde enero.
Por el hecho hay un hombre de 44 años detenido al que se le encontró en su poder una tarjeta de débito de Belén Pérez, con la que había hecho retiro de dinero.
El hombre detenido e identificado como Julio Perezlindo es investigado por haber utilizado en diferentes ocasiones la tarjeta de la joven embarazada en la localidad bonaerense de Maquinista Savio. La joven fue vista por última vez por sus familiares el 14 de enero.
A cinco meses de hallazgo de los restos óseos, la UFI de Trata de Personas de San Isidro le informó a la familia de Pérez que “son restos de Belén”, señalaron fuentes judiciales.
Ahora, los investigadores trabajan en la búsqueda de otras partes del cuerpo de la joven que aún no fueron hallados, contó una fuente policial.
La desaparición de Belén Pérez
La joven había sido vista por última vez el 14 de enero de este año, por su padre y su hermana, en la intersección de las calles Suiza y Santo Domingo, en Lagomarsino.
Desde ese momento, no se supo más nada de ella, por lo que se inició una búsqueda de la chica, quien cursaba un embarazo de cinco meses.
Tras varios rastrillajes, en abril encontraron restos óseos en un baldío de Lagomarsino. De hecho, Belén había sido vista con Perezlindo en el barrio Santa Teresita, el 20 de enero.
En mayo de este año, además, el Ministerio de Seguridad de la Nación había ofrecido una recompensa de 1 millón 500 mil pesos para quienes puedan aportar datos de la joven.
Quién es el detenido
Al prestar declaración, el detenido aseguró ser amigo de Belén y afirmó que el 20 de enero la joven durmió en su casa. Además, aseguró que antes de retirarse, cuando se quedó sola en la vivienda, la mujer sustrajo un televisor y elementos de valor que había en la propiedad.
Pérezlindo también dijo que volvió a encontrarse días después con la joven, quien habría reconocido el robo, asegurando que debía hacerse de dinero para pagar deudas.
Frente a esa situación, siempre de acuerdo al testimonio del detenido, le habría otorgado su tarjeta de débito para que este pudiera cobrarse la deuda.