Ayer entre las 10.00 y las 14.00, en el marco del Día Nacional de las Personas Sordas, hubo un encuentro y actividades para los alumnos de Lengua de Señas en la plaza San Martín de Belén de Escobar. Enseñaron cómo «hablar con las manos» en una jornada recreativa, educativa y para tomar conciencia de la importancia que tiene conocer cómo comunicarnos con la comunidad sorda para que realmente se sientan incluidos en la sociedad.
Todos los 19 de septiembre la Argentina conmemora el Día Nacional de las Personas Sordas, en recuerdo de la sanción de Ley 1.666 de creación del primer Instituto Educativo Nacional para Sordomudos en 1885. En esa fecha, organizaciones y referentes de la comunidad sorda aprovechan para difundir y concientizar acerca del respeto por las personas sordas y la necesidad de ejercer de manera plena sus derechos.
En medio de la jornada organizada desde el municipio, dialogamos con Patricia Gutiérrez, intérprete oficial y profesora a cargo del curso de L.S.A. que dicta la Municipalidad de Escobar, en la órbita de la dirección de Discapacidad.
«Estamos acá en la plaza de Escobar difundiendo, comunicándonos y compartiendo con personas sordas. El municipio de Escobar da cursos de Lengua de Señas totalmente gratuitos a todo el país y este año están involucrados tres alumnos del Perú, así que este año el curso se ha vuelto internacional. Hoy tenemos más de 4 o 5 mil personas haciendo el curso de Lengua de Señas.
Aquí estamos con chicos de la comunidad sorda, difundiendo, compartiendo y viendo qué podemos hacer para que todas las personas se puedan llevarse una información o una palabrita de Lengua de Señas a casa», mencionó Gutiérrez.
Lengua de Señas Argentina
La Lengua de Señas Argentina o LSA es la lengua empleada por la comunidad sorda en Argentina. Es una lengua natural, con una gramática compleja, completa y distinta al español.
Su origen puede remontarse a las primeras escuelas para sordos de Buenos Aires, entre los años 1880 y 1910: la Bartolomé Ayrolo, para varones; y la Osvaldo Magnasco, para mujeres. Estas escuelas surgieron por iniciativa del Instituto Nacional de Sordomudos, por medio de la ley 1662 del 19 de septiembre de 1885. Dicha ley indicaba como fin que se “enseñen a los sordomudos a usar la palabra puesto que si no permanecerán en un estado de incapacidad moral e intelectual”. El primer director del instituto, el maestro italiano Serafino Balestra, fue el primero en implementar la metodología oralista en América latina. A su breve período lo sucedieron sin cambios los médicos argentinos Garañao y Facio; y en 1892, el italiano Luis Molfino.
En ese momento, no eran usadas durante las clases, pero los estudiantes fueron desarrollándola y las usaban por fuera de éstas; sin embargo, los alumnos de ambas escuelas habían desarrollado lenguas distintas. En 1912 se conformó la primera asociación de la comunidad, ASAM (Asociación de Sordos de Argentina) en la que se incorporaron gradualmente gran parte de los alumnos de ambas escuelas y formaron distintos tipos de lazos sociales, incluyendo la formación de nuevas familias.
El primer diccionario de la Lengua de Señas Argentina fue publicado por la lingüista argentina María Ignacia Massone en 1993, luego de más de 7 años de investigación y la participación de más de 200 personas sordas. En 1994 la Dra. Massone y la referente sorda Emilia Margarita Machado publican el primer estudio de la gramática de la LSA, con la colaboración de 120 personas sordas argentinas. En la actualidad, existen varias investigaciones lingüísticas sobre distintos aspectos léxicos, gramaticales y discursivos de la LSA.