Por: Luis Frydel
La pandemia no detuvo los sueños de miles de jóvenes de todo el mundo ansiosos de jugar en las inferiores del actual campeón del fútbol argentino.
Triunfar en el fútbol como jugador profesional. Alimentar la ilusión de codearse con la fama. Fantasear con pisar pronto Casa Amarilla y la Bombonera. La posibilidad de defender los colores de un grande. Vestir la azul y oro. Ser ídolo quizá del club en un futuro. Jugar en Boca…
Una de estas cosas, más de una o todas ellas, pasan por estos días por la piel y la mente de cada uno de los jóvenes que resultaron elegidos en el reciente proceso de reclutamiento lanzado por Boca con el fin de nutrir sus divisiones inferiores. Lo novedoso, el medio utilizado, videos vía whatsApp, consecuencia obligada por la pandemia. Lo sorprendente, la cantidad de interesados y la diversidad de los orígenes de los mismos, con chicos y adolescentes auto postulados en gran número desde el lejano continente asiático o países como Egipto, Estados Unidos, México, Uruguay y Chile. Sueños «extranjeros» que se sumaron a los cientos de argentinos de todos los rincones del país que se animaron a enviar imágenes propias con una pelota pensando: «¿Y si me eligen?»
Todo comenzó con el tristemente célebre 19 de marzo pasado, día en que se paró el país. Desde ese momento, el club de la Ribera pensó en cómo sostener su plan de detección de talentos. Fue entonces que, zoom mediante, Emiliano Gallo, Daniel Rui, Juan Pablo Vitetta, Norberto Madurga, Roberto Passucci, Matías Arce, Diego Mazilli y Roberto Madoery, modelaron el proceso junto a Diego Medina, Coordinador General del Área de Captación y Scouting.
En un principio la solicitud proponía el envío de un video con imágenes de partidos oficiales de cualquier liga, no superior a los cinco minutos y elaborado por los aspirantes para quedar sujetos a un primer filtro de selección. Dado el escenario de las sucesivas cuarentenas, enseguida la propuesta fue extendida a imágenes estrictamente individuales que incluyeran manejos de balón sin importar si fuesen tomadas en una terraza, en un jardín o en un balcón, de modo de poder abarcar a todos quienes quisieran mostrarse y ser analizados y evaluados. Así los captadores ofrecieron sus números de whatsApp y el resultado fue altamente positivo.
«Nos hemos encontrado con mensajes muy alentadores, con infinidad de padres agradeciendo al Club Atlético Boca Juniors por observar a sus hijos y hasta preguntando si éramos realmente captadores idóneos o solo máquinas o computadoras. Nos llegaron videos de muchas partes del mundo, unos 4.500 aproximadamente», le comentó Diego Medina a este diario, agregando que en pocos días la intención se hizo inclusiva también a videos específicos de arqueros con un límite de presentación.
En cuestión de semanas el tamiz fue llevando la primera selección a un número de 1.500 y tras sucesivos análisis el arduo trabajo de escoger concluyó en una carpeta final de treinta privilegiados postulantes, llegando el tiempo de tomar contacto primeramente con los clubes de origen de ellos. La experiencia de la totalidad del equipo captador, con integrantes provenientes de la gestión anterior en la dirección xeneize y otros llegados por decisión del actual Consejo de Fútbol que lidera Juan Román Riquelme y que tiene a celebridades como Marcelo «Chelo» Delgado, Raúl Cascini o Jorge «El Patrón» Bermúdez, marca el rumbo de dónde apuntar de acuerdo a las necesidades estudiadas en las divisiones juveniles e infantiles.
«El punto de partida una vez hecha la selección siempre pasa por un protocolo de procedimiento que pone ante todo el contactarnos con los clubes de origen, siendo respetuosos de ellos y de todo convenio que exista. En cuanto a los puntos a observar en los chicos desde luego que entendemos en importancia primero a la técnica individual, luego la intensidad del jugador, el biotipo y sin dudas la parte mental que tanto relieve ha ganado en los últimos años para el alto nivel, sin descuidar el aspecto intelectual ya que fomentamos que los jóvenes estudien y se cultiven. Está demostrado que un jugador con su mente abierta al estudio es capaz de obtener por inteligencia mejores rendimientos en lo deportivo», redondea Medina.
El desembarco de un jugador en el predio de Boca en Ezeiza se hace recién después de que el mismo haya pasado varias etapas, habiendo sido evaluado al menos unas cuatro, cinco o hasta seis veces, con un mientras tanto que incluye siempre el diálogo con sus padres, entrenadores que lo hayan guiado y los clubes o equipos en los que se desempeñó, de modo de conocerle a fondo sus características y hasta sus hábitos de alimentación, costumbres y cuidados.
Puede decirse que el concluido scouting vía whatsApp para el reciente coronado en la Copa Diego Armando Maradona fue todo un éxito. Pero su búsqueda no termina. A partir de ahora, permisos provinciales y municipales de por medio, continuará la captación pero en forma presencial durante este 2021 y en todo el país.