ESTABA EN CAMPANA – «Brian B.» es el cuarto integrante de la banda atrapado por la policía. Otro de los imputados había sido detenido en Villa Rosa. La víctima, Germán Sallemi, fue estrangulada en el Hindú Club.
Efectivos del Comando Patrulla Campana detuvieron en las últimas horas a uno de los últimos prófugos de la banda acusada de asesinar a Germán Sallemi (25), un joven vendedor de dólares que fue estrangulado en un departamento del country Hindú Club, ubicado en Don Torcuato. El nuevo imputado es Brian Ezequiel Bogado, «Brian B.», de 28 años.
El crimen fue cometido en enero y por el hecho ya había tres detenidos, uno de ellos capturado en Villa Rosa.
Bogado fue detenido junto a un cómplice (un menor de 15 años) por robar chapas de un domicilio de la calle Ugartemendia al 300, en el barrio San Cayetano del distrito vecino.
Además de ser sindicado como el líder de la banca, Bogado está acusado de «homicidio agravado por concurso premeditado de dos o más personas y homicidio criminis causa», cuya pena es la prisión perpetua.
Otros tres sospechosos que ya fueron detenidos: Nicolás Alberdi, quien cayó en la villa 1-11-14 de CABA, Facundo Barrionuevo (23), capturado a bordo de un remís en Villa Rosa; y Santino Mármol, de 18, joven apresado en el country San Diego de Moreno.
Aún queda un último prófugo, Sergio Steimbrecher, de 19 años y conocido por su alias de “Siete?.
El hecho ocurrió el pasado 19 de enero, cuando los sospechosos citaron a Sallemi en un departamento del club de campo, presuntamente para comprarle dólares, debido que la víctima realizaba una especie de “delivery” de billetes y ofrecía sus servicios a través de las redes sociales.
Tras un llamado al 911 de testigos que escucharon gritos, efectivos de la comisaría 3ra. de Tigre acudieron al lugar y al ingresar a uno de los departamentos hallaron el cadáver de Sallemi, de 25 años, que se encontraba maniatado y con signos de asfixia.
De inmediato los policías iniciaron las actuaciones y de acuerdo a las primeras averiguaciones realizadas determinaron que el joven se dedicaba a la venta de dólares (lo que se conoce popularmente como un «arbolito») a domicilio y a través de internet.
En ese marco, fue citado en ese departamento del Hindú Club por tres presuntos compradores que habían alquilado el inmueble.