Un importante acontecimiento para la fe y la esperanza vivirán los vecinos de Maquinista Savio, el próximo domingo se inaugura una nueva capilla en honor a Santa Rosa de Lima, dependiente de la Parroquia San Expedito de Garín.
En ese contexto dialogamos con el Arzobispo Metropolitano, Monseñor Adrián Guedes, y con Jorge Pinedo, Monseñor y vicario de la capilla Santa Rosa de Lima.
«Dios llevó su obra hasta Maquinista Savio, en el barrio Los Talas. El día domingo 3 de septiembre vamos a inaugurar la nueva capilla Santa Rosa de Lima, que por supuesto va a depender de la Parroquia San Expedito de Garín. Va a estar acompañada por tres religiosos: Monseñor Jorge Pinedo, que va a ser el Vicario, junto con el Cura Teniente que va a ser el padre Matías Vázquez, y vamos a tener un sub diácono también, que va a estar permanentemente, el hermano Iván.
Ellos son los delegados para la comunidad. El presidente del Consejo Laico es el señor Julio costilla, de la colectividad peruana. Realmente es un honor para nosotros este poder recibir a todos y todas los que estén concurriendo a la capilla. La idea nuestra es el que la casa de Dios sea completa, que tenga un servicio completo. Que pueda no solamente rezar, sino también encontrar un lugar de paz y de austeridad, pero para que la comunidad se sienta cómoda».
«La comunidad cuando tiene la intención y Dios manda su Espíritu Santo, pasa esto tan mágico y tan hermoso que se llama fe, esperanza, y con mucha caridad se pudo armar la nueva capilla, que va a llevar justamente la advocación de Santa Rosa de Lima. Esta comunidad hermosa, peruana, que que puso todas sus garras, sus ganas, y así poder unirnos argentinos y peruanos para estar bajo la casa del Señor», determinó Monseñor Guedes.
La imagen de Santa Rosa de Lima, traída desde Perú, fue traída por Monseñor Pinedo y así contó el trayecto: «Tener esta experiencia y de verdad que es obra de Dios por todas las cosas que han sucedido, para poder tener la imagen tanto en confeccionarla allá, en embalarla. En principio va a venir por tierra, pero no se pudo, y vino en avión conmigo. A pesar de todo ya está acá, ya está lista para poder entronizarla en su capilla y seguir trayendo esta devoción de Santa Rosa de Lima, una paisana mía de Lima y que va a ser venerada y muy querida aquí en Argentina».
Desde ayer comenzó la festividad de Santa Rosa de Lima, en la Parroquia San Expedito, donde la imagen fue ungida con perfumes de rosas y Monseñor Pinedo, de Perú, celebró la Santa Misa. «El domingo el cura Párroco va a hacer la Misa de despedida y a las 14.00 invitamos a todos los cristianos de buena fe, a los católicos que nos acompañan. Vamos a salir en procesión desde la puerta de la Parroquia San Expedito hasta Maquinista Savio, donde va a ser esperado por la colectividad peruana y los gauchos a caballo, donde vamos a acompañarla hasta su lugar de de residencia que va a ser su propia capilla», aseveró Monseñor Guedes.
«La procesión va a ser en vehículos debido a la distancia, aunque algunos promesantes, los primeros promesantes de Santa Rosa, van a salir más temprano para encontrarse después con la Santa Misa alrededor de las 16.30 en el nuevo predio de la capilla. Pero la procesión va a ser en vehículos. A las 14.00 salimos en vehículos, despacito, hasta hasta Maquinista Savio», concluyó Monseñor Guedes.
Santa Rosa de Lima
Ayer, como cada 30 de agosto, se conmemoró a Santa Rosa de Lima, también llamada «Patrona de América». Fue la primera sudamericana en ser canonizada y la fecha recuerda su fallecimiento, el 30 de agosto de 1617.
Isabel Flores de Oliva, llamada Rosa por su madre debido a su belleza, fue una santa católica que perteneció a la orden de los dominicos. Se retiró a temprana edad a una vida de oración y penitencia: hizo una pequeña ermita en su casa, donde solía rezar por los necesitados y aquellos en busca de redención. Su entrega a la vida religiosa y sus actos de bondad trascendieron el Perú y llegaron a otros países.
Tanto fue así que el Papa Clemente X la canonizó en el año 1671, nombrándola como “Principal Patrona del Nuevo Mundo” (en ese momento América), Filipinas e Indias Occidentales. Entre los santos nacidos en el continente americano, Santa Rosa de Lima fue la primera en recibir el reconocimiento canónico de la Iglesia Católica.