Ayer se viralizaron imágenes de una mujer que denunciaba una feroz represión policial en su domicilio de Loma Verde, cuando se estaba desarrollando una fiesta organizada por su hijo, que vive en El Talar. Ocurrió en la madrugada del domingo.
En las redes sociales una mujer denunció una feroz represión en su casa de Loma Verde, ubicada en la calle Nigromante al 400. Según lo publicado por Paula Palacios en la red social Facebook «Eran como 20 policías en línea disparando balazos a quemarropa sin parar. Fue algo siniestro. Quedaron todos los pibes tirados y heridos, nadie los socorrió, nunca vino una ambulancia”, afirmó la vecina. “Estaban esperándolos como si fuera una emboscada”, agregó, con la bronca flor de piel.
«Se metieron en mi casa, fueron hasta el patio y los pusieron a todos boca abajo, le apuntaron a la cabeza. A algunos les pegaron en la cabeza y en el cuerpo”, remarcó. También denunció que, después de reprimir, los uniformados “se fueron y los dejaron tirados. Yo tuve que cargar a todos los chicos heridos y llevarlos para que los atiendan».
Las imágenes de jóvenes lastimados por balas de goma inundaron las redes, por lo que el revuelo de lo ocurrido captó la atención de todos los vecinos.
Fuentes oficiales confirmaron que hubo un operativo de dispersión con balas de goma ya que estaban atacando a dos policías del Comando Patrullas a los piedrazos.
De acuerdo a esas mismas fuentes, un móvil del Comando Patrullas que estaba circulando por la zona detectó una pelea entre jóvenes, donde uno de ellos estaría lesionado en su rostro y labios convulsionando en la vía pública. Se habrían acercado a asistir al herido intentando persuadir al resto para que cese la agresión. Luego habría comenzado un griterío reclamando la presencia de una ambulancia y una agresión hacia los uniformados que desencadenó en un caos mayor.
Llegaron móviles de apoyo y la situación se habría desbordado entre la policía y los asistentes a la fiesta, quienes habrían arrojado piedras a los uniformados.
Se supo que las agresiones habrían sido reprimidas con balas de goma, dejando a varios heridos entre los jóvenes. También hubo dos heridos entre el personal policial, producto de las piedras arrojadas.
La causa está siendo investigada por la UFI 1 de Campana, quedando las pericias en manos de Prefectura Naval Argentina y Gendarmería Nacional.