Hace pocos días, se incendió su casa de la calle Humberto Primero 1142, en la localidad de Matheu. La propietaria, Samanta Albornoz, agradece la ayuda brindada tanto por la Municipalidad de Escobar como de parte de quienes siguen colaborando con ella. Aquellos que lo deseen pueden acercar sus donaciones tanto a su vivienda como a la casa de su hermana, ubicada en Víctor Manuel II 816.
En diálogo con Grupoeldiario.com, Samanta, integrante de la Policía, contó la pesadilla que vivió aquel día: “Fui a dejar a mis nenes con el papá porque a la mañana siguiente tenía que hacer servicio adicional. Volví y donde vivo son tres viviendas. En vez de ir a mi casa, pasé a la casa del fondo, a lo de mi cuñado, a tomar unos mates antes de dormir. Mi sobrina estaba viendo una película y me quedé enganchada. Cuando terminó, salí para mi casa y ya se podía ver el resplandor del fuego de la pieza de mis nenes. Corrí con mi cuñado, golpeé la puerta a mis hermanos para que me ayuden y con aguas trataron de apagar el fuego. Sin embargo, cuando abrí la puerta entró el aire y la misma bocanada de fuego me tiró, se empezó a quemar todo mucho más rápido y no se pudo hacer nada”, detalló, además de que el fuego se originó a raíz de un cortocircuito ocurrido en la pieza de los chicos.
Actualmente pudieron conseguir una casilla prefabricada para vivir: “Es una mano enorme”, apreció la mujer. “La Municipalidad limpió el terreno, colaboró con máquinas, trajo tosca y prometieron que iban a traer escombros para hacer la base, para plantar la prefabricada”, añadió.