JUSTICIA FEDERAL – El Tribunal Oral Federal N°3 de Rosario condenó a seis integrantes de la organización que operó entre 2021 y 2023 en Rosario y Villa Ramallo. Los delitos incluyeron secuestros extorsivos, robo agravado y amenazas anónimas.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°3 de Rosario condenó a penas de entre 5 y 19 años y medio de prisión a seis integrantes de una organización criminal que entre 2021 y 2023 planificó y ejecutó secuestros extorsivos dirigidos a familiares de empresarios de Rosario y Villa Ramallo. La investigación judicial determinó que se trató de una banda con funcionamiento sistemático y distribución interna de roles, a la que los jueces calificaron como “compleja, profesional y estable”.
Las sentencias se basaron en un amplio cuerpo probatorio que incluyó intervenciones telefónicas, geolocalización de celulares, peritajes de voz, seguimientos encubiertos y análisis de un patrón delictivo repetido en cada hecho. El modus operandi consistía en simular operativos policiales o emboscadas sorpresa, trasladar a las víctimas a casas de seguridad en San Nicolás y exigir rescates millonarios a los familiares.
El principal condenado fue Claudio Daniel Coto, sentenciado a 19 años y medio de prisión. En tanto, Néstor Adrián Santabaya, mecánico señalado como jefe ideológico de la organización, recibió 17 años y seis meses de cárcel. Ambos fueron considerados coautores de secuestro extorsivo agravado (por la participación de más de tres personas y por haberse cobrado rescate en uno de los casos), robo agravado en banda, amenazas anónimas y extorsión en grado de tentativa. Además, Coto recibió una pena adicional por tenencia ilegítima de DNI ajeno.
También fueron condenados Emiliano Mario Andrés Acuña y el cerrajero Sebastián Ezequiel Pugliese a 14 años de prisión, como coautores de los mismos delitos. Pugliese fue declarado reincidente. Por su parte, Nicolás Adrián Santabaya –hijo del presunto líder– fue sentenciado a 5 años de prisión por asociación ilícita y tenencia ilegal de arma de guerra, mientras que Silvia Beatriz López, pareja de Pugliese, recibió igual pena como partícipe secundaria en uno de los secuestros.
Los hechos
El primer caso ocurrió el 24 de enero de 2023 en Villa Ramallo. La víctima fue A.D., hijo de un empresario petrolero y ex piloto de Turismo Carretera. Fue detenido en un falso operativo policial mientras conducía su camioneta Volkswagen Amarok. Permaneció cautivo en una vivienda de San Nicolás, donde fue retenido vendado y atado. Tras 24 horas de negociación, su familia pagó 580.000 dólares para su liberación, monto depositado en distintos puntos mediante instrucciones enviadas a través de mensajes de texto.
El segundo y tercer caso tuvieron lugar en octubre de 2023 en Rosario, con un intervalo de apenas cinco días. Los objetivos fueron la esposa y el hijo de 13 años de un empresario farmacéutico. En un primer intento, los secuestradores fallaron cuando su camioneta quedó atascada en la cochera del edificio. Sin embargo, el 10 de octubre lograron capturar a las víctimas y trasladarlas también a San Nicolás, donde permanecieron cautivas en condiciones precarias. Exigieron un rescate de 3 millones de dólares mediante amenazas vía WhatsApp. Ambas víctimas fueron liberadas sin que se concretara el pago, en un camino rural de Campo Salles.
La investigación permitió desmantelar la organización gracias a escuchas y seguimientos coordinados entre fuerzas federales y fiscales. El TOF destacó la violencia psicológica ejercida sobre las víctimas y el alto nivel de planificación criminal. Las defensas anticiparon que apelarán los fallos.