FALLO JUDICIAL – La Cámara Federal de Casación Penal confirmó el procesamiento del expresidente por la denuncia de violencia de género presentada por Fabiola Yáñez y resolvió apartar al juez Julián Ercolini. El nuevo magistrado será designado por sorteo.
La Cámara Federal de Casación Penal avaló este lunes el procesamiento del expresidente Alberto Fernández en el expediente por violencia de género iniciado por su expareja, Fabiola Yáñez, y dispuso el apartamiento del juez Julián Ercolini, quien había intervenido en la instrucción de la causa.
El fallo, suscripto por los jueces Alejandro Slokar, Guillermo Yacobucci y Ángela Ledesma, confirmó la acusación contra el exmandatario y al mismo tiempo admitió el planteo de su defensa por presunta falta de imparcialidad del magistrado. El tribunal consideró acreditado que existió una relación personal previa entre Fernández y Ercolini que “podría afectar la apariencia de independencia” requerida en un proceso penal.
Los camaristas destacaron que el propio imputado “expuso ante este Tribunal determinados pormenores vinculados con la relación de amistad y posterior enemistad con el juez Ercolini”, lo que brindó elementos suficientes para hacer lugar al pedido de apartamiento.
Pese a esa resolución, Casación aclaró que la salida del magistrado “no afecta la validez de los actos ya cumplidos”, por lo que todo lo actuado hasta el momento —incluido el procesamiento— se mantiene firme.
El expediente pasará ahora a un nuevo juez, que será designado por sorteo y tendrá la potestad de definir si eleva la causa a juicio oral. El fiscal del caso, Ramiro González, ya había dado por cerrada la etapa de investigación, por lo que el proceso se encuentra listo para avanzar.
Fuentes judiciales señalaron que, además del cambio de magistrado, la causa continúa en una instancia de actualización de pruebas. En los próximos días se prevé la citación de un nuevo testigo, luego de las declaraciones del exmédico presidencial, lo que podría aportar nuevos elementos al expediente.
Desde la defensa de Fernández anticiparon que presentarán nuevos escritos a partir del reemplazo de Ercolini, una estrategia que podría demorar la apertura del juicio.
El exjefe de Estado había insistido en varias oportunidades en el pedido de apartamiento, argumentando que con el juez existieron “circunstancias de mucha amistad y de profunda enemistad”, algo que —según afirmó— “es público y notorio”.
La resolución de Casación no solo ratifica el procesamiento, sino que busca garantizar la transparencia del proceso judicial al remover a un magistrado cuya objetividad fue cuestionada. Con la intervención de un nuevo juez, el expediente entra en una nueva etapa que definirá el futuro judicial del expresidente.